Se emplean las flores.
Se emplean las inflorescencias (cualquier ramificación que se resuelve en flores) y sus brácteas (hoja pequeña en cuya axila nace a menudo una flor). A veces se utiliza la albura (corteza privada de su parte externa o suber).
PRINCIPIOS ACTIVOS: Las Inflorescencias contienen mucílagos que le confieren una acción emoliente y calmante, aceite esencial (farsenol que es un alcohol sesquiterpénico, trazas de geraniol y eugenol con acción sedante ligera del Sistema Nervioso y antiespasmódica, y flavonoides: quercitrosido, isoquercitrosido, tilirosido (kaempherol-3-p cumarilglucosido) con propiedades diuréticas. Además poseen acción sudorífica y estimulante de las defensas.
INDICACIONES: La Albura contiene floroglucinol, taninos catequicos y galicos, heterosidos cumarinicos (fraxosido y esculosido) con propiedades coleréticas, antiespasmódicas, vasodilatador coronario e hipotensora.
Se utiliza contra la tos, insomnio, irritabilidad nerviosa, alteraciones hepato-biliares, migrañas, etc.
Acción hipoglucemiante.
Acción antiinflamatoria por disminución de la permeabilidad vascular.
Acción antiestress, demostrada en ratas.
Experimentos realizados demuestran cierta acción anticancerosa.
ACCIÓN: Estress, estado de fatiga, convalecencia, etc.
Para mejorar el rendimiento físico e intelectual.
Trastornos neuropsíquicos funcionales: neurosis, distonía vegetativa, neurosis del climaterio, etc.
Lesiones de los vasos coronarios, arteriosclerosis, hipotensión, etc.
Diabetes.
Anemias, falta de apetito.
Impotencia.
Estados infecciosos crónicos.
Acción antitusígena y expectorante, eupéptica y colerética, antibiótica y antiviral, antifúngica, antihelmíntica,
antiinflamatoria, cicatrizante.
Esta planta puede ser útil, entre otros trastornos, en fenómenos fermentativos intestinales, asma, bronquitis, gripes, catarros, heces malolientes, como tónica digestiva, tos, dolores espasmódicos digestivos, infecciones por hongos, lombrices, etc.
Presente en nuestro producto: